Hoy os cuento cúal fué unos de los días mas felices de mi vida,bueno...no fue un día feliz por completo,fueron unos escasos minutos,pero fueron momentos de inmensa felicididad.Os cuento.
En el año 2006 trabajaba en un hospital,trabajaba tal y como me pedían,tenía que tener una buena imagen,exquisito trato,suficientes competencias y sobre todo,la capacidad de dar buena imagen siempre del centro.Trabaja en urgencias.Sobre las 2 de la mañana,llegó una familia acompañada de una joven disminuída psíquica.La joven tenía fiebre y malestar general,pero se desconocía el foco de infección.Llamé a la doctora y mandó infinidad de pruebas (con el objetivo claro de que el resultado de las mismas llegaría pasadas 3 horas y podría seguir durmiendo placidamente).Las técnicas que debía realizan a la joven eran técnicas demasiado invasivas y poco coherentes para una simple fiebre,asi que decidí hacerle una analítica y una placa de cráneo ( la joven presentaba un cuadro compatible con una simple sinusitis).Tras escasos 20 minutos,llegaron los resultados y dimos en el clavo: Una simple sinusitis.
Llamé a la dra,durmiendo placidamente y le comenté que viviera a cerciorar si ,tras lo realizado,quería algo mas para asegurarse.Ella se indignó y volvió a pedir mas pruebas todavía,añadiendo una frase a sus incoherentes órdenes " contra mas pruebas,mas cobro,mas duermo y mas se pensarán volver a venir a urgencias por esta tontería".Tras eso,se marchó.Yo me fumé un cigarro.Llamé a otro médico,comenté la situación y avaló mi trabajo.Le dió el alta en media hora a la joven.Lo que sucedió cuando se levantó la dra de su plácido sueño,será otro capítulo por contar.
A los 10 días,tomando un cafe en la cafetería,se acercó el medico al que llamé aquella noche, para ver qué me parecía la placa.
"-¿qué placa me cuenta usted? "
"-No la has visto?,está puesta aquí mismo,en la cafetería,y creo que tienes mucho que ver en ella"
Cúal fue mi sorpresa al ver que había una placa,colgadita de un cuadro,donde ponía
-"LOS ÁNGELES NO ESTÁN EL CIELO,ESTAN AQUÍ.Gracias.Familia Gonzalez-Soto".
Aquella noche,entre esa familia y yo,hubo muchas conversaciones,pero una de ellas fue que la madre de la joven me preguntó que si estaba la cafetería abierta las 24 horas,yo le respondí que si y que habitualmente mataba yo allí mi tiempo muerto y que me conocía cada letrero,cada precio y cada mancha de la pared de la cafetería y que ojalá hubiera algo interesante que leer en esa pared a altas horas de la mañana,ya que los turnos y el ambiente no era del todo bueno.Ella se fué a tomar un café y supongo que cercioraría lo que le comenté.
El resto del tiempo que pasé en ese horrible hospital,siendo esa horrible enfermera,todavían se preguntaran algunos el por qué me veían estar leyendo siempre esa placa tan hortera.Si alguien pasais por montepríncipe,id a la cafetería y tomaros un café en su compañía.Es una buena anécdota que pocas personas conocen.
